Qué puedo escribir que ya no esté escrito? Qué puedo sentir después que el corazón se ha jubilado? Miradas fijas hacia un punto en la linea del tiempo se intensifican, y la respiración deja ya de ser parte de la rutina. Escucho una sinfonía, la 9 de un sordo, para ser justos, y las vibraciones me provocan una jaqueca graduada con años de experiencia. Prefiero escuchar a una tortuga muda intentando fugarse del diáfano rectángulo donde habita, que a cientos de personas trabajando. Es entonces cuando decido sumergirme en el lóbrego océano, sin tiempo definido de estadía. Total, Nadie notará mi Ausencia, ya que ambas son amigas de la infancia. Ultimamente el calor reacciona de un modo contradictorio sobre mi epidermis y produce unos insólitos escalofríos.
-Tardará en llegar? Posiblemente demorará, o simplemente nunca tomará el tren indicado. –Lo esperarás? No lo se, he de laborar tiempo completo en mis sueños para poder alcanzar mi meta. -A que meta te refieres? Ambiciono estar sentada a los 97 años en un buró de madera tallada de un elegante estilo art nouveau, tomándome una tacita de café con una amiga inseparable, celebrando el hecho que le gané a la puta vida y a sus contrariedades. -De que amiga me hablas? De Sole, así la conoce nuestro íntimo grupo de amigos. -Te noto tensa, distraida, agobiada.. que te sucede? Nada, sucede que escribir me angustia, detesto las incoherencias, la pésima ortografía y mi caligrafía. -Si es así como dices, para que te torturas tanto? Hay que tener mano dura con lo que odias y así cuando crezca se habrá amaestrado a ti. -Mano dura o perseverancia? Ambas. Noto que vas progresando a la hora de formular preguntas.-Gracias, yo en cambio percibo que tu juicio se agravia con cada una de ellas. (Risas)
Tienes razón, es hora de que regrese a la superficie y vaya por algo de comer. -Tú no cambias no? Siempre pensando en comer! No me regañes, piensa que todos los hombres mueren por alguna razón previamente enumerada en el manual. Yo solo opté por la gula, ya que me parecía atractivo morir por la boca cual si fuera un pez. Sabías que los peces no viven bajo el agua? -Ahora eres tú la que me hace las preguntas? Lo sabías o no lo sabías? -No, evidentemente no lo sabía. Como se explica eso? No, no se explica, simplemente es así. Tan solo piénsalo, y verás que no me equivoco en mis afirmaciones. -Tú bien sabes que no puedo ver, tu crueldad me aterra. No era mi intención, además no hace falta ver con los ojos abiertos. Yo lo hago todo el tiempo y es así como gano mi humilde percepción de las cosas, una filosofía modesta que describo como propia.-Tú no creces nunca! Tal vez estés en lo correcto, solo aquellos que crecen mueren, y yo no quiero. -No quieres crecer o morir? Yo solo quiero pensar, cosa que he hecho antes de nacer y que indiscutiblemente seguiré haciendo luego que el calor me abrase.
-Ahora que esperas? Analizo la forma correcta para abandonarte pero es inútil, solo agudizo el hambre ya anticipada. -No tienes que hacerlo. Lo se, pero ya lo he hecho antes y el desenlace no ha sido favorable, por eso temo tanto volver a errar. -Y si erras que pasa? Absolutamente nada, tan solo que el buró de madera dejará de ser tallado. -Entiendo. Al menos alguien comprende mis intentos fallidos de metáfora, eso me tranquiliza. -Una última pregunta… No, aun expirar no forma parte de mi itinerario. -Bueno disculpa, una última pregunta por hoy. Eres feliz? Es preciso que comprendas que mientras vivas o mueras no lo serás, ya que hay que sentir para poder serlo, y desafortunadamente todas las personas encasillan en una u otra de las alternativas previas. Suelen obsesionarse mucho por sus vidas e incluso llegan a negociar su propia muerte, presumiendo la localidad y materiales que atestiguaran la descomposición de sus ideas.- Y tú no piensas así? No, yo en cambio, detesto el mármol. Disculpa el sarcasmo, sucede que me enferma la humanidad. Y si, soy feliz, porque pienso que vivo mientras me asesinan los sentimientos, misma razón por la cual no crezco. Mi teorema es simple: mientras la vida me jode, la muerte me obsequiará cupones canjeables por años de vida, años de vida que se traducen en sueños, sueños que se transforman en ideas, ideas que evolucionan en hechos, y hechos que producen felicidad, por ende soy sumamente feliz. Ahora debo irme, he de comerme a la vida. Adiós. -Adiós.
Arianne Ponce.
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